Mientras el paradigma de Ciudad Inteligente va desarrollándose en multitud de ciudades, dentro y fuera de nuestras fronteras, muchos de nosotros, los que trabajamos en torno a las ciudades y sus avances, intentamos acertar en nuestra visión y capacidad de proyectarlas adecuadamente.
El concepto global de Ciudad Inteligente, aquel que primero nos viene a la cabeza, está ligado a la eficiencia, la competitividad de las ciudades o las empresas que en ella desarrollan su actividad y en general a la protección de nuestro medio; y no está nada mal, que nadie me malinterprete.
Lo que no tengo muy claro es si esos avances nos llevan al progreso que todos esperamos. Me parece que si sólo es eso y muchas veces al precio que sea, precisamente no seremos muy inteligentes.
La verdad es que el resultado de nuestra estrategia Smart, lo conformará una ecuación bastante simple y demoledora.
En el numerador podemos tener en consideración aspectos clave para el desarrollo, ya conocidos por todos, pero ojo al denominador. Hagamos que siga creciendo y pronto veremos el resultado de nuestras ciudades. Eso si, ciudades inteligentes.
Haz una prueba. No falla. Ya lo aprendimos en el cole, aumenta el denominador y rápidamente disminuye el resultado hasta hacerse insignificante.
Desde Woover, seguimos con nuestra visión allsmart © contribuyendo a ciudades que piensan en las personas y para ello, más que nunca, vamos a tener presente nuestra ecuación.
The Woover Crew.